Los pájaros y sus cantos son buenos para la salud mental / Birds and Their Songs are Good for Our Mental Health

Un estudio hecho por académicos británicos encontró que el canto de los pájaros es saludable para nuestra salud mental, tan así que se comprobó su efectividad en reducir la depresión en personas que la sufren. Estos hallazgos no son tan sorpresivos, ya no cabe duda que las visitas a la naturaleza son parte esencial de mantener una buena salud mental y de lo que en general conocemos como wellness. ¿A quién no se le ha dibujado una sonrisa en el rostro al escuchar el canto de un pájaro? Nos atrevemos a decir que a la mayoría de las personas. El mundo de las aves es enorme, tan es así que hay personas cuyas profesiones están relacionadas únicamente a estudiarlas y hay muchos otros que lo ven como un lindo pasatiempo, llamado birdwatching.

Nos encantaría poder destacar a todos los pájaros que habitan en los Estados Unidos pero por el momento hablaremos de solo unos cuantos. Quisiéramos que luego de ver estas fotos y aprender un poco más sobre ellos puedas identificar alguno en tus caminatas por el parque o estando en el patio o balcón de tu casa, y que cuando los escuches cantar tomes su canto como un mantra de alegría y paz.

Chara azul (Blue Jay)

Son conocidos por su inteligencia y complejos sistemas sociales con estrechos lazos familiares. Se encuentran cerca de las costas y en todo tipo de bosques, pero son más abundantes cerca de los bordes que en la profundidad del mismo. También son comunes en áreas urbanas y suburbanas, especialmente donde se encuentran robles o comederos de aves. 


Dato curioso: El pigmento de sus plumas es la melanina, que es de color marrón. El color azul es causado por la dispersión de la luz a través de células modificadas en la superficie de las puntas de las plumas. 

Jilguero (American Goldfinch) 

Estos hermosos pajaritos son el ave estatal de Nueva Jersey, Iowa y Washington. En la primavera, los machos son de color amarillo intenso y negro brillante con un poco de blanco. Los tonos de hembras son más apagados pero se identifican por su pico cónico, cola puntiaguda y con cortes. Puedes encontrarlos en prados, llanuras abiertas y otras áreas cubiertas de maleza, particularmente donde hayan girasoles para alimentarse. También son comunes en los suburbios, parques y patios.

Dato curioso: Los jilgueros se encuentran entre los vegetarianos más estrictos en el mundo de las aves, prefieren una dieta completamente vegetal y comen insectos ocasionalmente y sin darse cuenta.


Cardenal norteño (Northern cardinal)

El Cardenal norteño macho es quizás el responsable de lograr que más personas se interesen en el birdwatching que cualquier otra ave. Es una combinación perfecta de familiaridad, conspicuidad y estilo: tiene un tono de rojo que capta la vista y hace que no puedas dejar de mirarlos. Los cardenales no migran y no mudan su plumaje, lo que los hace impresionantes aún durante los inviernos. En verano, sus dulces silbidos son uno de los primeros sonidos de la mañana. Búscalos en áreas con arbustos densos, campos cubiertos de maleza, patios, matorrales pantanosos y jardines ornamentales. Los cardenales anidan en el follaje denso y buscan perchas bastante altas y llamativas para cantar. 


Dato curioso: El Cardenal norteño de mayor edad era hembra y tenía 15 años y 9 meses cuando la encontraron en Pensilvania.

Azulejo oriental (Eastern Bluebird)

Si vives en Estados Unidos y vas de paseo durante el verano te toparás con algún azulejo oriental posado en los cables telefónicos o ​​​​en su nido, cantando con una voz corta y vacilante o cayendo abruptamente al suelo persiguiendo a un insecto. Los machos son de un azul brillante en la espalda y la cabeza, y de un cálido marrón rojizo en el pecho. Los tonos azules en las alas y la cola le dan a las hembras un aspecto elegante. Les gusta vivir en campos abiertos alrededor de los árboles y sus hábitats originales probablemente incluían sabanas de pinos abiertas, estanques de castores y claros de bosques. Hoy en día, son más comunes a lo largo de pastizales, campos agrícolas, parques suburbanos, patios y campos de golf.
 

Dato curioso: Los azulejos orientales se encuentran en el este de América del Norte y en el sur hasta Nicaragua. Los que viven más al norte y al oeste tienden a poner más huevos que las aves del este y del sur.
 

Vivir al aire libre rodeados de todo lo que la naturaleza ofrece es de suma importancia no solo para nuestra salud mental si no para nuestro bienestar físico. Por eso, en el Sierra Club, luchamos día a día para mantener nuestro planeta y su flora y fauna en las mejores condiciones posibles dentro de la crisis del cambio climático que nos afecta.