MES DE LA HERENCIA HISPANA : Diana Umpierre, de la NASA al Sierra Club / Diana Umpierre, from NASA to the Sierra Club

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Representante Organizadora con el Sierra Club en Florida en las campañas para la Restauración de los Everglades y RESIST. Ganadora del Everglades Coalition Grassroots Award 2020 y miembro de la junta de directores del International Dark-Sky Association.

Durante el Mes de la Herencia Hispana le rendimos homenaje a una mujer cuya labor en pro del medio ambiente nos acerca más a nuestras metas de justicia ambiental. 

Cuando su padre falleció debido al Alzheimer, Diana Umpierre entró en un difícil período de transición. Durante un año decidió no trabajar para poder recuperarse del trauma y lentamente empezó a ser voluntaria en contra de la contaminación. Esta neoyorquina de sangre boricua siempre ha estado interesada en la ciencia espacial, la física, la astronomía y el medio ambiente. Después de trabajar un verano en la NASA, estudió geología y fue entonces cuando se enamoró de su planeta, al que ella reconoce como el más bello del universo.

Comenzó abogando por causas medioambientales protegiendo el cielo nocturno. Demasiada luz artificial durante la noche afecta el ritmo circadiano de la vida silvestre, incluyendo insectos, aves y tortugas. A través de una amiga, Diana comenzó a involucrarse con el Sierra Club en una posición como coordinadora de la Coalición de los Everglades antes de empezar a trabajar como organizadora de base para el Sierra Club.

“Tengo una pasión por ser defensora. Soy una ciudadana cualquiera que lucha por lo que ama”, comentó Diana en una entrevista conmigo. “Tenemos el poder de cambiar e influenciar lo que hacen las entidades gubernamentales”, concluyó. Respecto al Sierra Club, Diana no deja que los errores que cometió en el pasado  la organización sean un obstáculo a la hora de alcanzar los objetivos. Acepta que no es un pasado positivo pero que ya está en proceso de transformación y redención. 

La agricultura, los derechos de justicia social y los problemas medioambientales van de la mano, por lo cual Diana trabaja incansablemente con grupos que también defienden los derechos de los trabajadores agrícolas. “Me entristece que no le estamos dando la debida atención a las personas que trabajan nuestras tierras y ordeñan las vacas por ejemplo, y en las condiciones en que trabajan y viven. Mi padre fue una vez campesino”. La necesidad de una justicia ambiental comienza ahí.

A Diana le rompe el corazón pensar que muchos de los trabajadores agrícolas están expuestos a pesticidas, no tienen estaciones de lavado, ni hospitales cercanos. En los campos de caña de azúcar las comunidades están expuestas al humo tóxico de la quema de la caña. Los salarios son extremadamente bajos y aunque pagan impuestos tienen pocos beneficios. Es un trabajo muy duro,  por lo cual muchos son indocumentados y ni siquiera califican para un seguro de salud.

Al darnos cuenta de la conexión entre nuestro aire puro, el agua limpia, lugares naturales y alimentos saludables y cómo todo comienza con la forma en que tratamos a las personas en los campos, podemos hacer justicia en ese nivel, y a través de la industria. Los que siembran las semillas en el suelo se ven afectados directamente por los efectos del cambio climático. En Florida, la exposición al calor es muy peligrosa, pero lamentablemente no pueden hablar ni reclamar por miedo a perder sus trabajos. 

Contar con el trabajo, liderazgo y conocimientos científicos de Diana Umpierre es un verdadero honor para el Sierra Club y para nuestra comunidad Latinx alrededor del país. 

(English)

Sierra Club Organizing Representative in Florida for the Everglades Restoration Campaign and the RESIST Campaign. Recipient of the Everglades Coalition Grassroots Award 2020 and member of the board of directors of the International Dark-Sky Association.

During Latinx Heritage Month, we honor a woman whose work on behalf of the environment, which includes fighting against light pollution and protecting farmworkers' rights, brings us closer to our environmental justice goals.

When her father died from Alzheimer’s disease, Diana Umpierre entered a difficult period of transition. To recover from the trauma, she decided to not work for a year but instead slowly began to volunteer against pollution. This New Yorker of Puerto Rican descent has always been interested in space science, physics, astronomy, and the environment. After working for a summer at NASA, she studied geology, and that’s when she fell in love with her planet, which she recognizes as the most beautiful in the universe.

Her first job as an advocate for environmental causes was protecting the night sky. Too much artificial light at night affects the circadian rhythms of wildlife, including insects, birds, and turtles. Through a friend, Diana began to become involved with the Sierra Club and took a part-time position as coordinator for the Everglades Coalition before becoming a grassroots organizer.

“I have a passion for being an advocate. I am an ordinary citizen who fights for what she loves, ” Diana says. "We have the power to change and influence what government entities do." Regarding the Sierra Club, Diana does not let the organization's less-than-stellar past be an obstacle when it comes to achieving objectives. She accepts that the organization is already in the process of transformation and redemption.

Agriculture, social justice rights, and environmental issues go hand in hand, which is why Diana works tirelessly with groups that also defend the rights of farmworkers. "It saddens me that we are not giving adequate attention to the people who work our land and milk the cows, for example, and to their living and working conditions. My father was once a farmworker." She believes the need for environmental justice starts there.

It breaks Diana's heart to think that many Florida workers are exposed to pesticides and do not have washing stations or nearby hospitals. In the sugarcane fields, the communities are exposed to smoke from the burning of sugarcane. Salaries are extremely low and, although the workers pay taxes, they have limited benefits.  It is very hard labor, which is why many are undocumented and don't even qualify for affordable health insurance.

By realizing the connection between our clean air, clean water, natural places, and healthy food, and how it all starts with the way we treat people in the fields, we can do justice on that level and across the spectrum. Those who sow the seeds in the ground are directly affected by the effects of climate change. In Florida, exposure to heat is a huge dangerous burden, but sadly farmworkers are unable to speak or complain for fear of losing their jobs.

Having the work, leadership, and scientific knowledge of Diana Umpierre is a true honor for the Sierra Club and for our Latinx community around the country.