La ACLU, Comunidades Fronterizas y el Sierra Club Se Querellan por la Declaración de Emergencia Nacional

Washington, DC — La American Civil Liberties Union, la Coalición de Comunidades Fronterizas del Sur, el Sierra Club, ACLU de Texas y la ACLU del Norte de California se querellaron hoy contra la declaración de emergencia nacional del Presidente Trump para asegurarse de la obtención de fondos para construir un muro a lo largo de la frontera sur. La querella se presentó en nombre del Sierra Club y la Coalición de Comunidades Fronterizas del Sur en el Distrito Norte de California.

 

“El presidente está usando una declaración falsa de una emergencia no existente para socavar el sistema constitucional de equilibrio de poderes, lo cual daña profundamente a las comunidades que viven y trabajan en la frontera", dijo Cecillia Wang, subdirectora legal de la ACLU. "Hemos presentado estas querellas para impedir que la administración siga con este intento patentemente ilegal de robar el dinero de los contribuyentes para construir un muro que miembros del Congreso, expertos en seguridad y el público estadounidense han declarado que es innecesario y dañino".

 

La querella argumenta que el uso de los poderes de emergencia del Presidente Trump para evadir las restricciones presupuestarias del Congreso es inconstitucional, sin precedentes y desautorizado por el 10 U.S.C § 2808, el estatuto que invocó Trump. El Congreso restringió el uso de este estatuto a proyectos de construcción militar, como aeropuertos en el extranjero en tiempos de guerra, que son "necesarios para apoyar" el uso de emergencia de las fuerzas armadas. 

 

"Los muros y la hypermilitarización que está tratando de imponer el Presidente Trump no nos harán más seguros sino que degradará la calidad de vida de las 15 millones de personas que viven en la región fronteriza", dijo Vicki B. Gaubeca, directora de la Coalición de Comunidades Fronterizas del Sur. "La farsa de emergencia nacional de Trump va a destruir el tejido binacional y multicultural de nuestra región, desmantelar nuestro estilo de vida, y promocionar la hostilidad hacia los inmigrantes y comunidades de color de la frontera. Nos hemos querellado para asegurarnos de que a las comunidades fronterizas se les consulte sobre decisiones que impactan nuestro estilo de vida y para poner fin a este muro dañino, letal y despilfarrador".

 

Los querellantes instan a la corte a que impida que los departamento de Defensa, Seguridad Nacional y el Tesoro actúen para construir el muro fronterizo usando fondos del Departamento de Defensa o del Fondo de Confiscación de Activos del Tesoro en relación con la ilegal declaración de emergencia nacional del presidente. También instan a las cortes a que impidan que las agencias implementen el proyecto de muro fronterizo a no ser que dichas agencias cumplan con las necesarias regulaciones ambientales.

 

"Solo tienen que preguntar a las comunidades fronterizas — esta es una emergencia ficticia para construir un muro fronterizo innecesario, rechazado y destructivo ambientalmente", dijo Gloria Smith, abogada gerente del Sierra Club. "El muro causará que se destruyan comunidades fronterizas ricas en recursos históricos, culturales y ambientales, acabando con hábitat de vida silvestre y corredores migratorios para la fauna local. Este es un nuevo acto ilegal de abuso de poder por parte del presidente para culminar su agenda antimigratoria y antiambiental".

   

 

 

WASHINGTON — The American Civil Liberties Union, Sierra Club, ACLU of Texas, and ACLU of Northern California today filed a lawsuit challenging President Trump’s emergency powers declaration to secure funds to build a wall along the southern border. The lawsuit was filed on behalf of the Sierra Club and the Southern Border Communities Coalition and was filed in the Northern District of California.

 

“The president is using a bogus declaration of a non-existent emergency to undermine our constitutional system of checks and balances, in the process deeply harming communities living and working at the border,” said Cecillia Wang, ACLU deputy legal director. “We’re filing suit to stop the administration from moving forward with this patently illegal attempt to steal taxpayer money for a border wall that members of Congress, security experts, and Americans have said is unnecessary and harmful.”

 

The lawsuit argues that President Trump’s use of emergency powers to evade Congressional funding restrictions is unprecedented, unconstitutional, and unauthorized under 10 U.S.C. § 2808, the statute Trump invoked. Congress restricted the use of that statute to military construction projects, like overseas military airfields in wartime, that “are necessary to support” the emergency use of armed forces.  

“The walls and hyper-militarization that President Trump is trying to strong-arm through will not make us safer, but will degrade the quality of life of the 15 million people who call the southern border region home,” said Vicki B. Gaubeca, director of the Southern Border Communities Coalition. “Trump’s sham national emergency will tear apart the binational and multi-cultural fabric of our region, shred our way of life, and promote hostility towards immigrants and communities of color in border communities. We are suing to ensure that border communities are consulted in decisions that impact our quality of life and put a stop to this harmful, deadly and wasteful wall.”

The organizations call on the court to block the Departments of Defense, Homeland Security, and Treasury from taking action to build a border wall using funds from the Defense Department or Treasury Asset Forfeiture Fund pursuant to the president’s unlawful emergency declaration. They also urge the courts to block the agencies from implementing the border wall project unless the agencies comply with the necessary environmental regulations.

“Just ask people in border communities — this is a manufactured emergency to build an unnecessary, unwanted, and environmentally-destructive border wall,” said Gloria Smith, managing attorney at the Sierra Club. “The wall would bulldoze through border communities that are rich in historic, cultural, and environmental resources, destroying wildlife habitats and migration corridors for animals. This is yet another illegal and dangerous power grab by the president to further his anti-immigrant and anti-environment agenda.”

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